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miércoles, 10 de diciembre de 2025

El arte de la cetrería

 No se puede negar que la cetrería es un arte, un arte muy antiguo y muy perfeccionado a lo largo de los siglos, un arte que se basa en la relación entre el cetrero, sustento de posadero móvil, y el ave rapaz que en ese momento se encuentre en el aire, ambos con un propósito, cazar lo que sea que se mueva. Pero este deporte no nació con ese propósito.

Los primeros registros de la cetrería se remontan a Asia, donde las tribus utilizaban halcones y águilas para cazar presas necesarias para su sustento, sin embargo, esto no solo se volvió una rutina necesaria para evitar el hambre, sino que representaba un vínculo entre el hombre y la naturaleza.

Con el tiempo, el cetrero pasó sus conocimientos a nuevas generaciones, así sucesivamente hasta que llevaron a Europa, Oriente medio y África.

En la Europa medieval se llegaba a considerar al cetrero y su arte como una actividad de prestigio o un signo de estatus, donde un halcón bien entrenado suponía tu cercanía a la nobleza, o incluso que fueses parte de ella. 

Con el avance de los tiempos, la cetrería obtuvo un nuevo enfoque, la conservación de un patrimonio muy querido, tanto el cultural como el animal, donde su principal función era de preservar a especies en peligro de extinción como el peregrino o algunas clases de águilas y búhos, así como su uso en hábitats modernos, como por ejemplo en los aeropuertos donde se usan aún para espantar a las aves que se encuentren allí y evitar así accidentes.

Fue catalogada como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO en 2010. A día de hoy la tradición sigue viva, pero se enfrenta a todo el papeleo, legalizaciones y demás cosas que hacen que cada vez sea más difícil preservarla, al menos aquí. Es obvio que miramos siempre por la salud de las aves y su hábitat, pero resulta ser al final un proceso cansado, sin embargo, aquí seguimos, donde a pesar de todo, es un gusto volver a ver esos puestos de antaño y sus exhibiciones, que me recuerdan siempre a como inició todo lo que hoy estoy construyendo, incluido este pequeño blog.

Larga vida a mi amada cetrería por siempre.