Que pasa chavaleeeeeesssss!!!! como va todo??, aquí venimos con la entrada más larga (creo) del mes.
En esta ocasión vamos a continuar con la serie de entradas referentes al cernícalo primilla del blog, y bueno, se vienen cositas interesantes.
primero que nada, deciros que por primera vez, voy a decir el nombre de la iglesia en la que hemos actuado, ya que entre todos acordamos que es importante que se sepa su localización.
La iglesia, bueno, es la gran Iglesia de Santa Cruz, de Écija, que como ya comenté hace tiempo, alberga una colonia de primillas que supera las 19 parejas, y que regresan todos los años a los patios para criar.
La colonia en si, no necesita ninguna ayuda ya que puede y ha podido siempre subsistir sin que nosotros la ayudásemos, esto sería así, sino fuera porque comparten espacio con una manada de gatos asilvestrados, que viven a sus anchas por allí, y que están provocando la muerte de millones de aves, entre las que se encuentran los primilla, los vencejos, las palomas y los vulgares, además de destruir el patrimonio histórico.
Por eso, el equipo de GREFA Andalucía, pidió permiso al cura de la iglesia para echarle una mano a los cernícalos del sitio, pero para aquellos interesados, al final de la entrada, os voy a dar una noticia.
Los gatos habían sido echados anteriormente por el sacristán del lugar, que incluso es alérgico a estos animales, sin embargo, el aporte constante de alimento por parte de los vecinos, como ya hablamos hace un año en otra entrada, hace que éstos vuelvan constantemente al lugar.
Ahí una foto de uno de los cuencos desde el que se les da la comida, madre mía.
Y para eso, llegamos nosotros a las nueve y pico para trabajar.
las cajas
paloma ocupando un nido antiguo de primilla
Bueno, pues comenzamos a subir por las escaleras, nos abrió el sacristán un rato antes, mientras los compañeros terminaban de aparcar cerca, para transportar mejor las cajas, que a pesar de no llegar ni a los 100 escalones, tienen bastante inclinación, y son bastante cansados.
Tiene dos o tres descansillos, que perfectamente parecen huecos hechos a posta para meter un ascensor completo, muy bonitos y curiosamente limpios e iluminados.
Mira, yo, la verdad es que las alturas, pues como que no van de la mano con mi dichosa consciencia, ni las escaleras, (si eso es así con 16 años no me quiero ni imaginar con 40), pues, he subido ya hasta a las torres más altas, pues en ninguna lo he pasado tan mal como en ésta.
El primer piso de la torre, tiene el tamaño de una cocina promedio, pero posee unas cuantas campanas de un tamaño colosal, que hacen que ese espacio se vea reducido.
Cuando nos percatamos nuestra cara era de asombro, ya que no sabíamos dónde se pretendían colocar, hasta que nuestro compañero nos dijo que las cajas iban destinadas al segundo piso, osea más arriba.
Al segundo piso se accede por una escalera pequeña de hierro oxidado, que como te estires mucho te das de cruces en la nuca con otra de las campanas pequeñas que dan la hora, y el único que estaba despierto eran dicho compañero y mi padre, los demás entre el cansancio y la altura estábamos ya reventados.
Pero bueno, dicen que el miedo está para superarlo, así que me aventuré a ir segundo.
La Rosario, campana de descomunal tamaño que se encuentra en el cuerpo bajo de la torre.
Y la socorro, otra de sus hermanas, que se cuenta que cuando suena, toda la construcción vibra a su merced.
Suelo, bastante lleno de excrementos de paloma, lo que delata la gran presencia de esta ave en la actualidad aquí.
Bueno, las escaleras de caracol, estrechas como una aguja, eran por lo único que se llegaba por fin, al segundo piso o cuerpo, desde donde se divisa todo el pueblo y que no mide más de un cuarto de baño común, ahí la data para los curiosos.
Las cajas las comenzamos a colocar sobre los perfiles de los ventanales donde se encuentra las campanas, justo encima de nosotros había otra, y a los lados más, estábamos rodeados.
La caja anterior ya colocada
Así estaba antes de que colocáramos la caja en este lugar
Cuando llegamos a la iglesia, nos dimos con la sorpresa de una hembrita de vulgar que pasó volando por el patio, minutos más tarde capté al macho mientras volaba por la cúpula.
Pero, de un momento a otro, resulta que se empezó a escuchar el mismo canto, pero ojo, trisílabo, no bisílabo como el vulgar, dimos una mirada y en el patio logramos avistar a esta parejita, dos primillas cantando en el tejado del patio, también aparecieron otros dos ejemplares de la especie que se pasaron un rato volando.
Hembrita número tres en el tejado
Alguna hembra ya buscando nido para criar
A ver si les mola esta caja para la primavera que se viene
Desde aquí se divisa perfectamente la avenida de los emigrantes, colón y el convento de Santa Florentina
Foto desde el interior de una de las cajas
La última caja ya puesta, a punto de ser llenada con arena
Una de las cigüeñas que crían en la torre, pasó volando por los lados de ésta observándonos.
Y ya para acabar, las campanas nos habían tocado varias veces durante la mañana, para tocar la y media y la hora, sin embargo, justo cuando ya íbamos para abajo, comenzaron a tocar las del segundo piso porque estaban dando el Angelú, y nos pilló a tres del grupo en plena escalera y a tres arriba.
Los de las escaleras bajamos, nos esperamos por si tocaban otra vez la Socorro o la Rosario, estábamos seguros pero justo tocó la Rosario, y si con esta ya retumbaban las paredes no me quiero ni imaginar con Socorro.
Esperamos un rato, y cuando terminaron, los demás bajaron y dimos la jornada concluida.
La noticia de la que os he hablado es que, el ayuntamiento, un poco tarde pero al fin, ha puesto remedio a las 70 manadas de gatos salvajes del pueblo, entre las que se encontraba la de Santa cruz, esto se ha vuelto cierto, ya que los gatos de las manadas que hay por las calles que frecuento han desaparecido. Han sido capturados y vacunados, pero debemos esperar un tiempo para ver los resultados.
El ayuntamiento también ha comentado que después serán devueltos a sus lugares anteriores, por lo que si lo hacen estaremos en las mismas.
Así que gracias al empeño de GREFA y sus colaboradores, ahora los primillas están a salvo. Larga vida a los cernícalos primillas.
Un saludo camperos y nos vemos en una próxima entrada.